El fallecido compró una vivienda junto con la señora, pero finalmente solo se puso a nombre del fallecido. Ambos formalizaron un contrato de arras, y posteriormente se realizó la transferencia de las arras desde la cuenta de la señora. Sin embargo, el causante, mediante engaño, firmó la escritura de compraventa como propietario al 100% de la vivienda. No estaban casados ni eran pareja de hecho y ella no es heredera. ¿Qué se puede hacer en esta situación?
Existen varias acciones legales:
- Acción de simulación contractual (o nulidad por simulación relativa) y reconocimiento de la copropiedad: se podría alegar que la compraventa fue una simulación y que, en realidad, la titularidad era compartida. Se debe demostrar que el acuerdo entre ambos era ser copropietarios y que la titularidad exclusiva en el registro fue una maniobra fraudulenta.
- Acción de enriquecimiento injusto: Si no se puede probar la existencia de una comunidad de bienes, se podría reclamar por enriquecimiento injusto. Esta acción busca recuperar el dinero invertido en la compra.
- Reclamación en el procedimiento sucesorio: Si se puede probar que el dinero fue un aporte económico de la clienta hacia la compraventa y no una donación, podría solicitar la restitución de ese importe dentro del procedimiento de liquidación de la herencia y dirigiendo la demanda contra los herederos