Un hijo adquirió una vivienda mediante una hipoteca, pero en realidad ha sido su padre quien ha estado pagando las cuotas. Ahora, el padre desea poner la vivienda a su nombre, aunque aún queda hipoteca por pagar y el padre no tiene suficientes recursos económicos para afrontar la hipoteca. ¿Qué se puede hacer en este caso?
Es posible inscribir la vivienda a nombre del padre, incluso si existe una hipoteca pendiente:
- Se podría realizar una compraventa con subrogación de hipoteca, en cuyo caso el padre asumiría la posición del deudor hipotecario.
- Otra opción sería una compraventa con precio aplazado, donde se puede establecer que el importe pendiente de la hipoteca forme parte del precio aplazado. El vendedor mantendría la responsabilidad frente al banco hasta la cancelación.